Lyft reportó una pérdida neta de 463,5 millones de dólares en el tercer trimestre de 2019, pero el departamento directivo de la compañía cree que podrían llegar a números negros para el cuarto trimestre de 2021. Para cumplir con este objetivo, a principios de marzo Lyft adquirió la empresa de publicidad
Halo Cars. Ésta, instala pantallas inteligentes LED en los taxis y realiza publicidad en cualquier punto de Nueva York y otras ciudades donde disponga de flota. Los anuncios que ofrecen son geolocalizados, rastreados y pueden ser activados por una serie de variables como el tiempo, la hora y la ubicación. Los propietarios de vehículos cobran hasta 400$ mensuales por instalar las pantallas en sus coches. Anteriormente Halo había restringido el número de conductores que podían registrarse en la plataforma para realizar una campaña, no obstante, al pasar a ser propiedad de Lyft, este número podría dispararse. En 2017 había unos 1,4 millones de conductores y aunque no sabemos el número exacto a día de hoy, podemos ver un gran potencial del mercado publicitario para Lyft.